Y para cerrar el año.

Se me ocurrió ir con mi madre a hacer compras de fin de año y en medio de la tienda nos encontramos con una de sus amigas, que por lo visto no veía hace tiempo.

M: Hoooola, como estas?

A: Yo, muy bien, y tú?

M: Bien también, te presento a mi hijo.

A: Mucho gusto, como estas. Te cuento que ya soy abuela, de dos todavía, a mi hija se le dio por formar su familia y ha venido a visitarme con mis dooos nietos.

M: Mira quien como tú, por acá, nada.

A: Déjalo que disfrute de la vida, aunque yo también tengo una hija, la menor, que hasta ahora nada, que te parece si los juntamos.

M: Claro, estaría bien.

(En ese punto me di cuenta que lo que se venía no podía ser bueno.)

A: Ojala fuera tan fácil, los encerraríamos en un cuarto y ya está.

M: Por supuesto, ahí juntos que se conozcan una noche.

A: Y te apuesto que ni así pasa nada.

M: jaja, tienes razón, seguramente no hacen nada así los encerremos un día, completo.

A: Te dejo, Feliz Año.

M: Igualmente, que la pases muy bien.

A: Hasta luego.

Yo: Hasta luego señora (creo que después de mucho tiempo no he tenido que hacer una sonrisa tan fingida).

Cambiando de tema, de repente este año no ha sido del todo bueno o excelente, pero la vida es así con altos y bajos, y supongo que hay que ir aprendiendo a disfrutarla tal como se nos da.

Quisiera darles las gracias al G, a Caro, a Bobin, al Chico Migraña... y a todos los que de una u otra forma me han ayudado a lo largo de este año, un año que en su balance final, puedo considerar positivo.

Espero que este año venidero traiga sorpresas y cosas nuevas para todos, recuerden que no tiene nada que contar, quien nada ha vivido, así que si quieren hacer algo, no lo duden, haganlo, dicho casi todo lo que tenía que decir (había preparado otro post pero mejor decidí subir esto) y sin tener definido nada aun acerca de dónde voy a pasar esta noche solo me queda desearles a todos un Feliz Año Nuevo.