lunes, 17 de diciembre de 2012

Comics


Luego de una de las clases que estoy llevando, me quede con mi grupo a avanzar un trabajo que nos habían dejado. Ya que eran las siete y media de la noche y había que repasar una lectura para hacer su análisis y preparar una presentación, así que nos pusimos a leer.

Cuando indique que había terminado, una amiga me dijo: tan rápido?

Si – Le respondí.

Has llevado algún curso de lectura rápida? – me preguntó.

No – le dije – Según una amiga esos cursos solo funcionan para un tipo de lecturas y no creo en ese tipo de cursos. Es más aprendí a leer hojeando comics.

Y es que siendo honestos, siempre me he sentido fascinado por leer comics, luego de que me compraran mi primera historieta (Un tribilin que actualmente se desarma a pedazos y que tuve que engrapar de la mejor manera para no perder las hojas) le pedí tantas veces a mi mama que me la leyera que se cansó de hacerlo y no me quedo otra que aprender a leer.

Luego de eso, ya no quería libros de cuentos, quería historietas, mis propinas se transformaban en revistas que compraba casi todas las semanas. Empecé leyendo las revistas de personajes de Disney y Looney Tunes, luego aparecieron los superhéroes, mayormente Superman y compañía puesto que en esa época no recuerdo que hubieran muchas publicaciones de personajes de Marvel, salvo una serie de revistas del Hombre Araña y Hulk que se editaron algún tiempo.

Me emocionaban los comics de equipos de superhéroes, Los Superamigos o La Liga de la Justicia, y descubrí a los jóvenes titanes y a la Legión de superhéroes.

Cuando descubrí a Mafalda, no pude sentirme menos que encantado cuando la veía negarse a tomar la sopa y su actitud respondona frente a los estándares de los adultos, cuando leí al cuy no pude evitar sentir que había cosas que no andaban bien, Jacovitti me enseño a Coco Bill y aunque la primera vez que lo leí me maree con tantas cosas que aparecían en las viñetas, siempre lamente que únicamente pudiera conseguir dos números de esa serie.

Sin embargo, luego de unos años, los comics desaparecieron, le eche la culpa a la crisis post 80’s pero luego me entere que la Editorial Novaro que era la que enviaba los comics a Perú se había quemado y cerrado.

Ya en los 90´s solo podía comprar uno que otro cuando viajaba a Lima pues a Chiclayo nunca llegaban. Recuerdo que en uno de esos viajes conseguí el primer número de un crossover de Alien vs Terminator vs Predator y descubrí que los personajes se saltaban sus universos y cruzaban historias con personajes de otras editoriales, pero en general esos años fueron una especie de edad oscura de los comics para mí. Posteriormente, con la aparición del internet, empecé a descargarlos, era piratería pero era la única forma de leer comics y jamas comercialice lo que baje.

Ahora hay una especie de nueva masificación de la cultura comiquera, empezó con Peru 21 publicando comics de marvel y DC (Al fin pude leer en físico Civil War) y ahora se está publicando The Walking Dead, Hellboy y se van a publicar comics de Star Wars. Ademas de las siempre clásicas distribuidoras como contracultura y otras librerias similares.

No puedo negar que ahora, igual que con los video juegos, no tengo mucho tiempo para andar al pendiente de todas las publicaciones, pero trato de mantenerme al día de lo que sale, para poder elegir que comprar y leerlo y aunque muchos digan que solo es una pérdida de tiempo, lo siento, cada uno tiene su afición, y esta es una que no pienso dejar, al menos por el momento.

La buena musica no podia deprenderse de los personajes comiqueros, asi que aqui les dejo a The Ramones y su version del tema de Spiderman

jueves, 29 de noviembre de 2012

Arbol que nace torcido


Creo que la mayoría de nosotros cuando hemos sido niños, hemos pasado por el típico ritual de conocer a los hijos de los amigos de nuestros papas o de los amigos más cercanos a la familia.

Como yo no podía ser la excepción, a mí también me toco pasar ese ritual, y si bien es cierto recuerdo que conocí a varios niños de mi edad, en su gran mayoría son únicamente un recuerdo vago sin rostros definidos. Pues usualmente, más allá de las ocasiones en que me los presentaban, a pocos de ellos los volvía a ver. Y si por un lado, debo reconocer, que nunca he sido muy sociable, (Por si acaso, amable lector, estoy en una época de introspección, creo que a todos nos pasa) en esa época no había tantas formas de conectarse como ahora. Oseaaaa, no existía San Facebook y si a alguien le hubieran hablado de algo similar a la gran nube de la internerd posiblemente hubiera pensado en una novela de ciencia ficción, creo que ni siquiera en Perdidos en el espacio aparecía algo así :s

Recuerdo a un par de hermanos que vivían arriba del cine Tropical, hijos de una amiga de mi mama a la que solíamos visitar de cuando en cuando. Eran mayores que yo y cuando iba, me solía entretener jugando con ellos sus juegos de mesa, me gustaba subir las escaleras que llevaban hacia su casa, las cuales solían ser bastante frescas a diferencia del calor que tenemos normalmente en Chiclayo. Ambos eran siempre amables conmigo, e incluso recuerdo haberme puesto junto con ellos a mirar desde la ventana de su casa el parque principal de la ciudad y observar como transcurría la apacible vida norteña, una vista que aun tengo en la memoria y que en mis remedos de fotógrafo aficionado me gustaría poder tener ahora. 

Además de estos dos hermanos, hay otra chica a la que recuerdo, era sobrina de una amiga de mi tía, vivía junto con su hermana o prima no lo recuerdo con claridad, pero eran más o menos de mi edad. Mientras a los dos hermanos los conocí cuando yo tenía 6 o 7 años, a ella la conocí ya cerca de los 10 años. Las pocas veces que llegue a su casa, ella y su ¿hermana/prima? fueron bastante afables conmigo, pero eran dos niñas y mis ánimos de sociabilizar con ellas nunca fueron los mejores, yo aún andaba más interesado en la hora que darían Mazinger Z o los capítulos nuevos de los superamigos. A pesar de eso, un día llego a mi casa un sobre de colores con mi nombre, era una invitación para la fiesta de cumpleaños de la niña. Luego de abrir el sobre, le dije a mi mama que no quería ir, no recuerdo muy bien las reacciones en mi casa, pero creo que me miraron mal.

El día del cumpleaños se acercaba y la verdad yo me había olvidado del asunto (creo que ni regalo fui a comprar), hasta que un buen día luego del colegio mientras leía unos comics, recibi una llamada, era la niña.

Hola - me dijo con su vocecita.

Yo le respondí el saludo y pregunte quien era, pues la verdad ni se me ocurrió que fuera ella. Luego de decirme su nombre y preguntarme como estaba, vino la pregunta de rigor.

Llamaba para saber si ibas a venir a mi fiesta – me explicó. 

Ahora que lo pienso, en ese momento debería haber tenido a mi lado al robot de perdidos en el espacio agitando sus brazos, prendiendo sus luces de emergencia y gritando Peligro!!! Peligro!!! Peligro!!!

Sin embargo, no contaba con el dichoso robot y no hubo nada que me pudiera alertar de lo que se venía.

No – le respondí de manera inmediata.

¿Por qué? – me dijo ella. 

Al escuchar la pregunta, lo único que salió de mi boca fue un rudo y torpe: Porque no quiero.

Lo siguiente que escuche fue el pitido del teléfono cuando se corta la llamada y a mis casi 10 años por primera vez sentí en el pecho esa sensación que uno tiene cuando siente que hay algo que no debió haber hecho.

En general, creo que no he sido muy sutil para decir lo que pienso en mas de una ocasión, lo que me hace pensar en muchas ocasiones que esa expresión de árbol que nace torcido jamás se endereza puede ser cierta, pero me niego a aceptarla así tan fácilmente. Al fin al cabo, somos humanos capaces de aprender y mejorar, si no lo logramos, lo intentamos nuevamente, si nos caemos, nos levantamos, si fallamos, corregimos, porque al fin y al cabo se supone que aprendemos a ser mejores cada día. Espero estar haciendo poco a poco mi parte.

Boys don't cry..


lunes, 22 de octubre de 2012

Ya no soy un gamer


En una de las tantas noches en la ciudad hecha de cajitas, mientras me dedicaba a leer los apuntes de mis clases, uno de mis compañeros de cuarto prende su laptop y de pronto me parece escuchar unos sonidos familiares. Giro mi cabeza hacia su pantalla y veo a un guerrero orco luchando contra unos elfos.

Warcraft III o World of Warcraft? – Le pregunto.

DOTA – me dice mirándome con los ojos abiertos - ¿juegas en red? – agrega con cara de alegría…

De pronto resurgen en mi cabeza nombres como Starcraft, Warcraft II y III, Command and Conquer: Red Alert y Generals, Medal of Honor, Call of Duty, Commandos, Age of empires, Age of Mythology, Fifa, PES, Need for speed: Most wanted y Hot Pursuit, son nombres que para muchos suenan a idioma “klingon” pero que en su mayoría son conocidos para cualquiera que se precie de ser un gamer.

En predilección siempre me jalaron más los juegos de estrategia, luego los FPS y al final de la lista los de deportes y autos. Aunque debo reconocer que el NFS Most Wanted me ocupó varias noches cuando trabajaba en Piura y no me animaba a salir del cuarto para ir al cine o simplemente dar una vuelta por la ciudad.

De eso, mucho tiempo ha pasado, ahora mis instaladores de juegos lucen enmohecidos en un rincón de mi armario. El año pasado compré entusiasmado el Starcraft II dispuesto a jugarlo hasta llegar a su cinemática final, sin embargo los discos ni siquiera los he instalado.

Lejos quedan los días en que me sentaba frente a la pantalla de mi computadora dispuesto a vencer a la maquina o a un eventual contrincante en una partida en red. En esos tiempos, buscar mejores armas, reforzar tropas, buscar un artilugio o ganar experiencia para mejorar las habilidades de tu personaje, ganar puntos y dinero para adquirir un nuevo jugador para tu equipo o comprarle algún nuevo aditamento a tu vehículo, eran lo que ocupaba mí tiempo libre.

Aun leo revistas o blogs acerca de los juegos de ahora, Assassins Creed, Black Ops, Knight of the Old Republic no son nombres de juegos que me suenen desconocidos, quisiera poder jugar Injustice: Gods among us, sé que hay nuevas versiones de los crossovers de Street Figther con los héroes marvelianos, pero definitivamente ya no soy un gamer.

Jugaba, Warcraft III hace tiempo, ya no lo hago hace tiempo – Le digo saliendo de mis recuerdos.

Tal vez algún día podamos jugar una partida en red – Me propone.

Puede ser, tengo una antena que emite señal para crear redes inalámbricas, si me animo a traerla y encuentro los controladores, jugamos cuando termine de estudiar – Le comento, mientras vuelvo a sentarme sobre mi cama.

Eso será hasta el otro año - me dice mi compañero riéndose.

Sí, es cierto – le digo mientras me sonrío y empiezo a leer nuevamente mis apuntes de clase, el fin de semana tenía examen y tenía que seguir repasando. A pesar de eso, un grito resonó en mi cabeza: For the horde!!!


Si algo me gustaba de los juegos de EA eran sus intros, la combinación de las canciones y las escenas eran alucinantes, aquí va la de FIFA 98 - Road to the world cup con Song 2 de Blur.


lunes, 1 de octubre de 2012

De champus y de colores no han escrito los autores...


Por estos tiempos, he tenido algunos cambios en mi vida. Ya no vivo en Lima la horrible, ahora me he mudado a una ciudad hecha de cajitas.

Cada día al finalizar la jornada de trabajo, voy a mi cuarto a descansar. Este cuarto lo suelo compartir con tres personas, lo cual es bueno porque puedes conversar un poco antes de dormir, aunque a veces te sientes un poco hacinado.

Un día, encontramos que nos habían asignado un nuevo compañero. Se había acomodado en una las literas y estaba leyendo mensajes en su cel (Cosa que hacemos casi todos ni bien llegamos a nuestras camas) otro de mis compañeros luego de saludarlo se metió al baño y al rato salió con un champú entre las manos.

Quien ha traído este champú con ceramidas?

Es mío - respondió el nuevo

Es que se me enriendan mucho los rulos – agrego finalmente.

Y esa amigos míos fue la respuesta de un rudo trabajador de construcción :s

Luego de este episodio, no pude evitar recordar este comercial:



Una buena semana a todos :)

lunes, 6 de agosto de 2012

Que fue lo que paso?

Soñé contigo, y me di cuenta que a pesar de todo el tiempo que pasado, aun no logro entender lo que ocurrió entre nosotros dos.


Sera tal vez por que así como dos monólogos no pueden hacer una conversación  tal vez dos soledades juntas no pueden formar una relación...



Soundtrack:
Porque no escuchas lo que está tan cerca de ti,
Solo el ruido de afuera y yo, estoy a un lado, desaparezco para ti...

Que lástima pero adiós, me despido de ti y me voy, 

Que lástima pero adiós, Me despido de ti..... y me voy.



martes, 12 de junio de 2012

Una noche de Encrucijada


Hace algun tiempo cuando practicaba ingles en un club de conversación, una amiga me presto un libro, creo que era britanico. En mi ingles basico e incipiente lei una historia que me gusto mucho, hoy la quiero recordar de esta manera…

El crepitar de la leña se confundía con los otros sonidos de la noche, el arquero se acerco sigilosamente al grupo que se encontraba sentado alrededor del fuego sin que nadie se percatara de su presencia.

Mi señor he revisado todos los alrededores del castillo – anuncio apareciendo inesperadamente al lado del que parecía el líder del grupo y todos los que estaban sentados se levantaron empuñando sus armas.

Rayos, siempre tienes que acercarte de esa manera? - Gruño el más grande del grupo – un día de estos te voy a cortar la cabeza de un solo tajo.

A callar, no quiero discusiones, al menos no esta noche – dijo finalmente el lider – dime que has visto por favor.

El castillo está fuertemente protegido, han traído tropas desde las comarcas más lejanas y están armándolas con todo lo que tienen a la mano. Mi señora se encuentra presa en la torre más alta del castillo, flanqueada por armas y hechizos oscuros. El señor tenebroso tiene a la bruja a su lado todo el tiempo alertándolo de todo, lanzar un ataque directo para rescatarla con nuestras tropas es un suicidio – al finalizar de describir lo que había visto, el arquero se quedo callado, jamás decía más de aquello que fuera necesario.

Dejadme los hombres a mí, mi señor. Mi hacha está lista a cortar cuanta cabeza se cruce en su camino, ataquemos el castillo – bramo el grandulón.

Lo sé mi fiel guerrero, pero la prudencia es lo más adecuado en estos tiempos difíciles – respondió calmadamente el líder del grupo – un grupo pequeño que se infiltre por la parte baja del castillo podría ser más efectivo, e igual necesitare del apoyo de tu fuerte brazo.

No será fácil, pero mi arco y mi flecha son suyos, a donde usted vaya iré yo, mi señor – señalo el arquero haciendo una reverencia.

Esta es una misión peligrosa, solo los que deseen ir conmigo lo harán – sentencio el líder.

Iré con usted - respondió el arquero.

No ha nacido quien se atreva a cortarme el paso, yo también iré mi señor – bramo el grandulón.

Y tú? mi fiel compañero, me acompañaras en este desafío? – dijo el líder mientras volteaba a mirar a un maduro hechicero.

Debes pensarlo bien, mi joven señor, un duro objetivo te has planteado, no sé si a buen puerto puedas llegar y puedes perderlo todo, incluido tu vida – replico el hechicero.

Lo sé mi buen amigo – respondió el líder – Pero dímelo tu, estoy  destinado al fracaso? No volveré a estar en presencia de mi amada?  Tú que con tu tercer ojo todo lo ves, aquello que nadie más puede conocer. No puedes darme con tu Ajana esas respuestas – Inquirió finalmente el joven caballero.

Con ella te veo nuevamente mi señor, los veo juntos y felices, pero no sé si es en esta vida o en alguna otra– sentencio finalmente el hechicero.

Eso me es suficiente, al castillo mis valientes!!! – los guerreros respondieron con un grito de guerra mientras empuñaban las armas dispuestos para una nueva batalla.

Hay ocasiones en que las no sabemos a ciencia cierta si ganaremos o perderemos, solo sabemos que vale la pena ir a luchar por aquello que deseamos, no dejen que nada detenga sus sueños.

viernes, 1 de junio de 2012

Laguna Neveria (Una y otra vez)


Se dice que cada uno tiene su bestia negra, algún reto u objetivo que nos cuesta lograr aunque hayamos obtenido otros más difíciles. Mi bestia negra tiene un nombre “Laguna Neveria”.

El año pasado realice dos intentos por llegar a la Laguna, uno por la ruta larga, otro por la corta. El primero fue por la larga, lo tuvimos que abandonar debido a que al intentar subir por las quebradas Gratom y Uscupampa en época de lluvias, ambas venían cargadas y nos retraso el ascenso. El segundo fue por la corta, terminamos por encima de la laguna en lo que denominamos el mirador de Neveria, llegamos demasiado tarde como para intentar bajar hacia la misma y nos regresamos.

Este año decidí intentar ascenderla nuevamente y hace unos meses llegue a la Laguna por la ruta corta. Sin embargo, aun me quedaban las ganas de hacer la ruta larga, este fin de semana en conjunto con gente del club decidí hacer esa ruta y armamos la expedición en carácter de exploratoria y como parte de un nuevo proyecto.

Desafortunadamente las cosas no empezaron del todo bien, uno a uno de todos los que iban a ir a abandonaron la salida. Al final, en San Mateo nos encontramos únicamente Chacaltana y yo, por un momento pensamos en dejar la exploratoria para otra ocasión e irnos a entrenar a Putca, ruta que ambos conocíamos, con menor desnivel, pero que nos llevaba a mayor altura que Neveria inclusive. Luego de descansar en Las Americas, descartamos dejar atrás lo planeado y nos enrumbamos a la quebrada Gratom. Salimos algo tarde, pero una vez que cruzamos la reja de acceso al camino, empezamos a subir. El avance se torno algo lento pues no lograba ubicarme del todo por momentos y Jose, que no salía desde que subimos el Vallunaraju, tenía que coger ritmo nuevamente.

Un perrito se nos unió en la trepada, le puse de nombre Gratom, era bastante afectuoso y parecía conocer el camino de subida, así que subimos jugando un rato con él. Al llegar al final de la quebrada, nos encontramos con una señora que nos confirmo que estábamos en la ruta y doblamos hacia la quebrada Uscupampa a seguir trepando, Gratom se quedo con la señora y me despedí de él. Ya en esta parte de la ruta había un camino más definido y seguimos subiendo más tranquilos. Nos encontramos con un poblador, que me dijo: esta es la ruta, sigue el camino siempre, de aquí vas a llegar a la unión de dos ríos, toma la quebrada nomas, todo a la derecha, al final de la quebrada, ahí está la laguna. Luego de conversar un rato, le dimos las gracias y nos dejo atrás.

Luego de un rato, ahí estaba la bifurcación. Sin embargo, el camino se iba hacia la izquierda que era por donde parecía seguir la quebrada principal, a la derecha no solo no había camino sino que la quebrada hacia una curva cerrada hacia la derecha que parecía hacernos regresar hacia san mateo, Decidimos separarnos con Jose y buscar la ruta, subí por la derecha, sin embargo, todo el camino estaba flanqueado por ganado y no había atisbos de algún acceso. Por la izquierda el camino continuaba y me pareció ver una parte conocida de la vez anterior en que había venido, sería posible que hubiera escuchado mal, al fondo veía una cuesta de color tierra, que recordaba como el tramo final que debía subirse bastoneando, había que tomar una decisión así que fuimos hacia la izquierda.

La ruta en este tramo se torno bastante dura, subimos cuesta tras cuesta, siguiendo la quebrada, hasta llegar a una pequeña explanada donde se encontraban pastando un grupo de vacas. Usualmente el ganado es manso, sin embargo el toro que parecía ser el líder nos agacho la cabeza e inmediatamente 5 toros se pusieron delante de la manada como si fueran una formación de mustangs protegiendo a un escuadrón de B-17’s, atrás las vacas se juntaron con los becerros y algunos toretes, me hubiera gustado tomarle una foto a la manada, pero los toros ya estaban perdiendo la paciencia y decidimos seguir subiendo.

La ruta nos mostraba las que yo estimaba eran sus dos últimas cuestas, una larga y con una pendiente más o menos fuerte y la cuesta color tierra que mencione anteriormente, corta y con una pendiente bastante pronunciada. Si estábamos en la ruta correcta, subiendo el último tramo deberíamos ver la bajada a Neveria, pero para ese entonces, eran las 12:30 del día, cerrar las dos cuestas nos iba tomar bastante tiempo, y aunque regresáramos por Chicla, íbamos a regresar demasiado tarde, por un momento pensé en seguir trepando, sin embargo el cansancio ya nos había restado velocidad. Mire la cuesta nuevamente y debí aceptar que ese día no llegaríamos a la laguna. Dimos la media vuelta con Jose y nos regresamos a San Mateo por donde habíamos subido, una vez más, debí abandonar la ruta a Neveria.

Bajamos de a pocos, pues la ruta camino estaba llena de piedras pequeñas, que convirtieron el camino en una plataforma para un deporte de deslizamiento, no para una ruta de trek, nos resbalamos un par de veces y de no haber sido por los bastones hubieran sido muchos más. El clima además se portó además de manera inestable, primero un viento helado nos obligo a sacar las casacas, luego el viento se fue tan rápido como apareció y los rayos del sol se decidieron a acompañarnos hasta obligarnos a sacarnos las casacas nuevamente, sea como fuere empezamos a descender, poco a poco, las vacas ya no estaban donde las habíamos encontrado solo dos o tres de ellas quedaban y un becerro dormía al lado de ellas, fuimos avanzando siempre con cuidado, tratando de ubicar el camino por donde habíamos subido. Al llegar a la bifurcación nos sentimos más tranquilos y seguimos el camino. Más abajo encontramos al señor que nos había dicho por donde subir y le contamos que no habíamos llegado a la laguna.

Es que no es por donde ustedes han ido, les dije todo a la derecha – Nos dijo el señor mientras bajaba con nosotros.

Pero no había por donde seguir, no había camino y la quebrada se cerraba– le respondí.

Al entrar a la quebrada debían subir la loma – me indico, doblando la mano hacia la izquierda – por ahí te vas a la laguna, cerca nomas esta. Por donde ustedes han ido se va a Caronpoma, hay lagunas pero al fondo, a más de un día de camino.

Por ahí no se va a la laguna de ningún modo? – pregunte tratando de armar un rompecabezas mental de todo lo que habíamos recorrido.

Si se llega, pero lejasos es, tienes que dar bastante vuelta, mucho han caminado – me dijo finalmente.

En cierta forma me alivió el no haber insistido en subir la cuesta a la que nos estábamos dirigiendo, anímicamente nos hubiera chocado hacer todo el esfuerzo por subirla y no encontrar nada, y el agotamiento generado por el esfuerzo nos hubiera hecho más difícil el retorno.

Casi al llegar a la Gratom, el señor nos dejo atrás, mientras Jose y yo bajamos ya más tranquilamente, pues a pesar de todo habíamos podido bajar a un ritmo constante y aun era temprano. 

Recordé una frase que había leído a media semana, según la internerd es de Benjamin Franklin, “No he fracasado. He encontrado 10,000 soluciones que no funcionan”  me di cuenta que tenía razón, si bien es cierto no había logrado la ruta, al menos ya sé por donde no hay que ir. Al fin y al cabo la montaña es como la vida, ambas son una suma de aciertos y errores, de éxitos y fracasos, en el que los logros te llenan de satisfacción y las fallas te sirven de hoja de ruta para analizar que es aquello en lo que debes mejorar. Ademas, la subida había sido un buen entrenamiento.

Pronto he de regresar a finalizar este trayecto, me prepararé mejor e intentare nuevamente llegar a la laguna, no porque tenga que vencer esta ruta sino porque tal como debo hacerlo día a día, debo superarme a mí mismo para lograr ser mejor en la montaña y en la vida misma…

Soundtrack para hoy: una canción que solía acompañarme durante mis recorridos por Cajamarca.

Hoja verde de la coca, humo blanco del cigarro, 
Adivinenme la suerte, compañeros de la vida...



miércoles, 25 de abril de 2012

Y si te digo?


Y si te digo que tengo ganas de llamarte para decirte que me gustaria verte?


Y si te digo que la paso bien contigo y que me gusta cuando estamos juntos?


Y si te digo que me gustas y no se como decirtelo?


Y si te digo tantas cosas que me pasan por la cabeza????


Que me dirias tu?



Sácame de esta duda mi amor, si sigo así me voy a arrebatar,
Avísame de una vez por favor, si tus ojitos me quieren mirar...





martes, 17 de abril de 2012

Cumbre!!! Cumbre!!! Cumbre!!!


“El alpinista es quién conduce su cuerpo allá dónde un día sus ojos lo soñaron” - Gaston Rébuffat


La mañana del viernes 06 de abril del 2012, parado en la cima del Vallunaraju, a 5686 m.s.n.m. por fin pude entender a plenitud esta frase, y es que siempre sentí que el Apu Vallunaraju era mi montaña, la primera que subiría, con la que cumpliría mi sueño.


Sin embargo, esa mañana al alcanzar al fin mi tan ansiada cumbre y admirando la cordillera blanca a mi alrededor, me di cuenta que todo este tiempo había estado equivocado, no había cumplido mi sueño, tan solo lo había empezado...


Cumbre!!! Cumbre!!! Cumbre!!!

viernes, 30 de marzo de 2012

Una trepada al San Andres


El fin de semana un grupo de Camycanes fuimos a subir el pico del San Andrés, una ruta que había hecho el año pasado, pero que intenté nuevamente hace unas semanas y no pude lograr. Y si bien es cierto, el mal clima fue el que nos hizo bajar cuando apenas llegamos al glaciar, ese día me regresé con el mal sabor en la boca de no haber podido avanzar al ritmo que supuestamente avanzaba antes, además de que me frikee subiendo en la morrena. Esto ha sido una constante desde el año pasado, luego que me lesionara, dejara de entrenar y salir, gané peso, perdí velocidad, resistencia y muchas otras cosas más.

A pesar que desde enero he venido haciendo algunas rutas, y creo que las he logrado casi todas, no he logrado sentirme bien conmigo mismo en todo este tiempo. No sé porque pero no lograba gozar la montaña de la misma forma en que lo hacia el año pasado, salvo en algunos chispazos momentáneos.

El domingo parecía un día más de esos, mientras subíamos a Ticlio por un breve momento en el auto tuve problemas para respirar, algo que no me había pasado nunca antes. Cuando empezamos a caminar, subí de forma lenta y pensé que no lo lograría nuevamente, el único consuelo que me quedó fue que los cursos con el sensei han dado algunos resultados y podía trepar mejor por las rocas.

Al llegar al glaciar, mire lo que aun faltaba y no sabía si lo haría. Comí algo de cancha con queso (gracias Yessi, gracias zorro) con un poco de agua y empecé a trepar con el grupo. Para malear aun más las cosas, no había llevado crampones así que fácil si alguna cuesta se ponía jodida por la nieve me iba a quedar abajo. 

Empecé a caminar y no sé lo que me paso, pero me sentí más tranquilo, al llegar a la primera cuesta cogí mis bastones y me lance a treparla, no me resulto fácil, y como la subí algo rápido, al llegar a la explanada mi respiración estaba agitada. Mire hacia atrás, había hecho la cuesta, tenia que hacer el resto de la ruta, tenía que llegar hasta el final.

Al continuar la caminata, recordé algo que me había pasado hace algunos meses.  Me encontré con un amigo de la universidad al que no veía hace mucho tiempo y luego de conversar un rato, me dijo: “He visto tus fotos en el face… te saliste con la tuya, estás haciendo lo que te gusta”. “Sí” -  le respondí algo turbado – “lo estoy haciendo”. Al recordar en medio de la nieve esa escena, me di cuenta que mi amigo tenía razón, esto es lo que realmente me gusta, no soy el mejor trekkeando o escalando roca o subiendo una montaña, pero esto es lo que siempre he querido y quiero hacer.

Al llegar al último tramo de la ruta hacia la cumbre, enfrente de nosotros había una pared, alistamos el equipo pensando en que si no encontrábamos una ruta, tendríamos que escalar. Afortunadamente Angie y Paola al llegar nos indicaron que había una arista por la que se podía subir trepando, me dije de todo al darme cuenta que era la arista por la que había subido hacia un año antes y no la había reconocido. A pesar de eso, mientras subía detrás de Jean Marc y Carlos Alexander, me sentí otra vez, realmente en la montaña. Mientras me acercaba cada vez más a la cumbre, el horizonte y la mezcla de colores de la nieve y las rocas de las montañas de Ticlio conformaban un cuadro que aun recuerdo hoy día y hacen sentirme bien conmigo mismo nuevamente.

No sé si algún día me ganaré el derecho de llamarme a mí mismo “montañista”, de ser uno más de aquellos conquistadores de lo inútil que cada cierto tiempo suben tras una ruta, una vía o una cumbre para, según aquellos que no los comprenden, recibir únicamente frio, maltrato, cansancio y sufrimiento. Pero lo que sí se, es que mientras la vida me lo permita, subiré a la montaña, a aprender de ella, a desafiarme, putearme y superarme a mí mismo. A decirme si puedo, cuando ya el cuerpo me diga que no da más, a decidir dar un paso más hacia la ruta cuando simplemente te dan ganas de dar la media vuelta y regresar a casa, a enfrentar mis miedos cuando las cosas se pongan complicadas, a aprender a mantener la calma aun en los momentos más difíciles.

Debido a esto, cuando trepé finalmente la cumbre, no pude resistirme a gritarlo desde el fondo de mi ser: Cumbre!!! Cumbre!!! Cumbre!!! No como un desafío a la montaña, sino para decirle que estaba ahí nuevamente y me sentía feliz de haberlo hecho.

Finalmente solo me resta darles las gracias a todos aquellos hermanos montañistas con los que he compartido todas estas vivencias y experiencias, especialmente a los camywachiturros por tenerme tanta paciencia en la roca, un abrazo a todos ustedes. Nos vemos en la ruta.


No es un soundtrack pero este video me parece apropiado para el post

miércoles, 21 de marzo de 2012

Quisiera


A veces quisiera dejar de mirarte, sin embargo tu mirada se encuentra clavada frente a mis ojos.
A veces quisiera ya no recordarte, sin embargo tu voz se ha impregnado en mi memoria.
A veces quisiera dejar de pensar en ti, sin embargo incluso cuando las cosas se ponen dificiles me parece escuchar tu risa.
A veces quisiera ya no buscarte, sin embargo mis pasos siempre terminan a tu lado.
A veces quisiera dejar que todo esto muera antes que nazca, sin embargo tu presencia lo llena de vida.
A veces quisiera ya no querer tanto, pero como dice la cancion, la locura siempre le gana a la razon...


Quisiera que me hablaras cuando callas, o al menos ser el nudo en tu garganta...
Quisiera, y tantas cosas más quisiera...
Y contar contigo,
y doblar las calles,
y sembrar guayabas,
y soñar con mil detalles...


jueves, 8 de marzo de 2012

Mujer

Fatal cazadora que te cuelas frente a nosotros en los momentos mas inesperados,
Sin siquiera darnos cuenta, aletargas nuestros sentidos uno a uno,
Y mientras tu mirada nubla nuestros ojos, tu perfume abruma nuestro olfato,
mientras tu voz embriaga nuestra cabeza, tu calor envuelve nuestros cuerpos frios,

Con las defensas ya caídas, nos convertimos en rivales vencidos,
Que estancados en medio de la confusión y sedados por el embeleso,
Nos dejamos intoxicar plenamente de tu dulce veneno,
Ese que una vez emponzoñados, estamos dispuestos a probar una y otra vez de tus dulces labios.

Hoy no quise poner soundtrack, pero quiero dejar este pequeño poema del gran Gustavo Adolfo Becquer.

RIMA XXI
—¿Qué es poesía?, dices, mientras clavas 
en mi pupila tu pupila azul, 
¡Qué es poesía! ¿Y tú me lo preguntas? 
Poesía... eres tú.

miércoles, 29 de febrero de 2012

Te quiero


Te quiero carajo - Le dijo ella, mientras lo miraba a los ojos fijamente.


Entonces ¿Porque te vas? - Pregunto el cogiéndole la mano.


Porque hay ocasiones en que el amor no es suficiente - Le dijo finalmente ella, mientras se iba para nunca más volver



Necesito verte, donde quiera que estés
Te quiero, te quiero, Te Quiero,
Y no hago otra cosa que pensar en ti,
Solo vivo y respiro para ti...


miércoles, 8 de febrero de 2012

Macho que se respeta

Creo que todos hemos leído alguna vez las historias de “el macho que se respeta”. Suelo leer en Facebook o Twitter a varios amigos que se divierten citando las dichosas frases en los comentarios o en los retweets, recordándoles a sus brothers que están dentro del perfil de “macho” y jodiendo a los que no encajan porque de hecho si eres un hombre que cría un gato, de seguro te la comes entera y doblada…

Nunca me ha preocupado mucho encajar en los parámetros del macho que se respeta, ya que más allá del vacilón, me parece que varias de estas historias exageran los estereotipos del verdadero macho. Lo acepto, no soy Chuck Norris o Rambo; uso bloqueador solar cuando salgo al campo por que al fin y al cabo no quiero rostizarme peor que pollo a la grasa; me gusta cocinar y aunque no lo hago muy seguido, lo disfruto; no me afeito con machete; ni me limpio los fluidos nasales con la manga, entre otras cosas.

Eso sí, hay parámetros mínimos de macho. Jamás me he negado a ir de campamento o a salir a la montaña porque de seguro no habrá un baño cercano, eso nunca será algo que me quite el sueño. Cuando salgo a tomar con mis patas, mis brothers, mis yuntas de toda la vida, “los del barrio”, no propongo ir a tomar vino y comer piqueos. Está bien que los tiempos ahora sean otros, pero en salida de machos se toma chela a temperatura rompe pulmones así sea en invierno. Caso contrario, cada uno con trago corto en mano - monócromo o bicolor, nada de colores múltiples adornándolo, menos aun espumita, sombrillita o cañita que pueda representar algún deseo fálico oculto. Si alguna vez has tomado algo así, preocúpate bro.

Finalmente y más allá de los parámetros mínimos de macho, nunca me preocupe por cumplir con las famosas frases de “el macho que se respeta”. Sin embargo, el día que luego de agarrar una granadilla y dudé en darle tramite porque no encontré una cucharita con que comérmela, debo reconocer que si me preocupe un poco…

Y para sountrack de este post una cancion que habla de todo lo que un macho de pelo en pecho quiere ser, jeje

Every man wants to be a macho macho man, to have the kind of body, always in demand...
macho, macho man, I've got to be, a macho man...